Últimamente
se está poniendo de moda usar la palabra “teambuilding” pero… ¿Qué es? ¿En qué
consiste? ¿A quien va enfocado? Hoy en nuestro post esperamos despejar todas
esas dudas, ¡vamos allá!
Lo
primero de todo… ¿Qué es el teambuilding? Según la definición que nos da
nuestra querida amiga la Wikipedia, es un
término colectivo para definir un conjunto de actividades que busca formar
equipos de alto desempeño y mejorar las relaciones interpersonales dentro de un
grupo. Actualmente es una de las herramientas clave en el desarrollo
organizacional y es aplicado a diversos tipos de grupos como son unidades
militares, equipos deportivos, tripulaciones de vuelo y altas gerencias en
empresas por nombrar algunas.
Es
decir, el teambuilding está basado en el trabajo de un grupo de personas, que
de forma organizada e integrada realizan actividades que ayudan a mejorar
aspectos como el liderazgo, la comunicación y el trabajo en equipo. Estos
aspectos, potenciados en un entorno completamente diferente al de trabajo,
aporta a los miembros de una empresa aspectos relacionales y personales que les
ayudan a complementar sus conocimientos relacionados con la profesión.
Este
movimiento ha surgido con el fin de aprovechar las reuniones de los equipos de
trabajo para mejorar las habilidades personales, profesionales y de grupo
mediante el trabajo en equipo. Este tipo de eventos pueden ser tanto en espacios
interiores como en espacios al aire libre y pueden tener un programa de
actividades, aunque no necesariamente. El éxito de este método se encuentra en
el uso del aprendizaje basado en las vivencias y las experiencias y que ayudan
a los equipos a pensar, observar, hacer, sentir y compartir, tanto de forma
personal como en grupo, aumentando la consciencia de equipo y mejorando la
comunicación interna de la empresa.
Nuestro caso:
El
pasado 17 de junio fue un día diferente y especial para los miembros de Elda
Creativa. Ya sabéis que a día de hoy somos pocos pero valientes, así que
cogimos nuestro coche, nuestras camisetas corporativas (muy poco llamativas –ya
me entendéis-) y nos embarcamos con destino a Terra Mítica. Así comenzaba
nuestra I Convicreativa…
Tenemos
que decir que pasamos un día muy entretenido, nos reímos mucho, descargamos
adrenalina, pero sobre todo nos conocimos un poquito más en un ambiente
diferente al de todos los días en nuestra oficina. No se habló de trabajo, ni
de tareas pendientes, ni se atendieron llamadas… Fue una “jornada de
esparcimiento” en la que además de conocernos mejor y trabajar en equipo
disfrutamos de una convivencia sin distracciones ni interrupciones.
La
Convicreativa fue todo un éxito y si hay algo en lo que coincidimos todos los
miembros de nuestro equipo es que nos sirvió para recargar pilas y lo más
seguro de todo, repetiremos.
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